Una noche de locura. De cubatas, uno detrás de otro. De trajes. De gritos. De acostarse a las tantas de la madrugada. ¿Que cómo se cura? Un poco de maquillaje para las ojeras y unas gafas de sol para los ojos rojos atrapados de una noche del humo de los cigarrillos
No hay comentarios:
Publicar un comentario